Envía reforma constitucional al Congreso
- Reconocer a los pueblos indígenas y afromexicanos como sujetos de derecho público, atendiéndolos de manera preferente por ser los habitantes más antiguos y, sin embargo, los más olvidados de México.
- Derecho a pensión a adultos mayores a partir de los 65 años y aumentar el monto cada año; las personas con discapacidad recibirán un apoyo universal.
- Becas a estudiantes de familias pobres en todos los niveles de escolaridad.
- Atención médica universal gratuita.
- Que los trabajadores y familias puedan ser dueños de sus viviendas.
- Prohibir el maltrato animal.
- Proscribir en el territorio nacional la extracción de hidrocarburos mediante fracking, no otorgar concesiones para la minería a cielo abierto.
- Hacer respetar las zonas con escasez de agua y solo autorizar en ellas concesiones para uso doméstico.
- Prohibir el comercio de vapeadores y de drogas químicas como el fentanilo, penalizar con severidad el delito de extorsión de la delincuencia organizada, lo mismo con el delito fiscal ejercido por la “delincuencia de cuello blanco” mediante factureras.
- No permitir que el aumento al salario mínimo sea menor a la inflación anual.
- El salario mínimo para maestros de la educación básica de tiempo completo, de policías, guardias nacionales, soldados, marinos, médicos y enfermeras no será menor a lo que perciben los trabajadores afiliados al seguro social.
- Revertir las reformas a las pensiones, tanto la aprobada en 1997 como la de 2007, “porque afectan injustamente a trabajadores del seguro social y del ISSSTE, pues les impiden jubilarse con el 100% de su salario”.
- Garantizar el derecho a la educación y al trabajo; cuando los jóvenes no estén estudiando ni trabajando, el Estado debe contratarlos y pagarles el equivalente a un salario mínimo durante un año, mientras se forman en talleres, empresas o el campo.
- Todos los campesinos que cultiven tierras sembrando árboles frutales y maderables contarán «con un jornal justo y permanente», como en el programa Sembrando Vida; los campesinos y pescadores seguirán recibiendo apoyos del programa Producción para el Bienestar.
- Se utilizarán para trenes de pasajeros los 18.000 kilómetros de vías férreas actualmente concesionados y destinados únicamente al transporte de carga. Asimismo, el Estado estará obligado a garantizar el derecho a los servicios de internet, ya sea con una empresa pública o concesiones a compañías particulares. Se le devolverá a la CFE su carácter de empresa pública estratégica «en beneficio de los consumidores domésticos y del interés nacional».
- La nueva iniciativa de reforma electoral contempla la reducción de los gastos destinados a campañas y partidos políticos; disminución del número de regidores en ayuntamientos; que se evite el uso de excesivas estructuras burocráticas electorales; eliminar las candidaturas plurinominales (el Congreso se integrará por 300 diputados y no por 500, y el Senado se conformará por 64 y no 128 senadores).
- Jueces, magistrados y ministros del Poder Judicial, en vez de ser propuestos por el Ejecutivo y nombrados por legisladores, serán electos de manera directa por el pueblo.
- Para evitar que la Guardia Nacional «se corrompa como la antigua Policía Federal», se propone que esta institución forme parte de la Sedena, con estricto respeto a los derechos humanos.
- Convertir en política de Estado la austeridad republicana; se volverá a redactar con mayor claridad y contundencia en el artículo 127 de la Constitución el principio de que ningún servidor público de los tres poderes pueda ganar más que lo que perciba legalmente el presidente de la República.
- Eliminar todas las dependencias y organismos onerosos y elitistas “supuestamente autónomos”.