El presidente Andrés Manuel López Obrador elogió la obra social y cultural del ex gobernador Enrique González Pedrero en Tabasco, y, para cerrar la mañanera de este jueves, afirmó que después del poeta y museógrafo Carlos Pellicer, «todos los tabasqueños somos de segunda».
Antes de referirse a la biografía intelectual y política de quien fuera director de la facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Nacional Autónoma de México, el mandatario agradeció la reciente opinión de Cuauhtémoc Cárdenas en torno al gobierno que representa, y contó una anécdota registrada en la Constitución legal del Partido de la Revolución Democrática (PRD), el 5 de mayo de 1989.
«(…) Entonces, en esa convención se propone que el presidente del partido fuese el ingeniero Cárdenas y él se para y dice: ‘No, yo propongo a Andrés Manuel’, en 89. Esa es mi relación con el ingeniero Cárdenas.
» Yo decliné porque yo estaba en Tabasco, pero él hizo esa propuesta desde el inicio. Y luego, hemos estado juntos, estamos hablando del 88 a la fecha. ¿Cuántos años son?»
A 36 años de ese episodio, el presidente López Obrador, a pregunta expresa, se refirió a «Don Enrique González Pedrero, el maestro Enrique González Pedrero, es uno de los mexicanos, de los últimos tiempos, que más sabía sobre historia de las ideas políticas, un intelectual de primer orden, director de la Facultad de Ciencias Políticas, escritor».
En ese contexto, aludió al texto México, país de un solo hombre, producto de la última investigación histórica «de años» de González Pedrero. Además, dijo, «buen gobernante de mi estado, de Tabasco».
Mencionó que el ex gobernador fue senador, director de la Comisión de Libros de Texto; «muy amigo» de don Jesús Reyes Heroles —tal vez el último ideólogo del PRI—. Señaló que se formó en la época que se creó la Facultad de Ciencias Políticas con don Pablo González Casanova, con López Cámara, con Víctor Flores Olea. «No, un intelectual, político reconocido, amigo de (Octavio) Paz, honrado».
—¿Dónde está la riqueza de Enrique González Pedrero?—, soltó en el Salón Tesorería de Palacio Nacional. «Compró una casa en… me daba tristeza ahora que fui a allá…», dijo, removiendo el recuerdo del lugar que llevó al equipo de prensa de presidencia a proyectar el mapa de la república para buscar entre los límites de Guerrero y Morelos, el lugar olvidado.
En cuanto a su obra en Tabasco, refirió. Por ejemplo, fíjense, construyó puentes, porque para cruzar de un lugar a otro, en Tabasco, por los ríos, todo era en panga, para cruzar Frontera que es el municipio de Centla e ir hacia Ciudad del Carmen, en la costa; pues es la desembocadura del Usumacinta y del Grijalva; es un río de, no sé, 300, 400, quizá más, y él construyó el puente.
Luego construye sobre el mismo Río Usumacinta el puente que comunica a otra cabecera municipal. Tabasco tiene 17 municipios, entonces, comunica la cabecera municipal de uno, que es Frontera, que es la desembocadura de los ríos Usumacinta y Grijalva al golfo.
Luego comunica otra cabecera, Jonuta, que también había que pasar en panga el río Usumacinta, estamos hablando del río más grande de México, y él hace ese segundo puente.
Y luego, comunica otra cabecera, Balancán, tres grandes puentes.
Y en el terreno cultural, la obra editorial, pues sólo tres gobernadores han hecho obra editorial: el maestro Francisco J. Santamaría, que era un escritor también, de los que salvó en la matanza de Huitzilac —donde asesinaron, entre otros, a Rafael Martínez de Escobar—, aquí en Morelos, y luego llegó a ser gobernador, y era escritor. Tiene un diccionario sobre mexicanismos, que se los recomiendo, cuando no encuentren una palabra muy mexicana, ahí está, gran maestro. Pero la obra editorial, vendió su biblioteca a la Universidad de Berkeley, California.
El segundo que hizo un buen trabajo editorial con el licenciado Antonio Mena Brito, que lo recuerdo mucho, era un señor muy respetado, que le ayudó mucho al ingeniero (Leandro) Rovirosa; hizo también una obra editorial espléndida.
Y el tercero fue Enrique González Pedrero.
«Ahora, después de Carlos Pellicer, todos los tabasqueños somos de segunda».
Luis Enrique Martínez
Rumbo Nuevo
