Ricardo Arjona se despidió de los escenarios luego de concluir su gira Blaco y Negro en Chile, debido a los problemas de salud que admitió haber sufrido durante los últimos meses.
Un cominicado compartido a través de sus redes sociales reveló a los fanáticos del cantautor guatemalteco que durante los últimos meses del tour debió someterse en varias ocasiones a un procedimiento médico llamado infiltración de columna para mantenerse en pie. Según la misma publicación, la gira Blanco y Negro –que sin saberlo se convirtió en la última– llevó a Arjona a recorrer más de 100 países durante los más de 12 meses que duró.
Las infiltraciones
La infiltración es un procedimiento mediante el cual se inyectan medicamentos directamente en la zona a tratar, y es usado comúnmente en traumatología y reumatología.
De acuerdo con Guías de Prácticas Clínicas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) las infiltraciones suelen practicarse para inyectar analgésicos o corticoides para mitigar el dolor en los pacientes.
El procedimiento debe practicarlo un especialista en traumatolofía y ortopedia, además de que su aplicación podría no ser recomendable en todas las zonas del cuerpo.
En el texto donde Ricardo Arjona se despidió de su público también detalló que durante los últimos dos meses recibió seis infiltraciones de columna, las cuáles le peritieron terminar su gira. El cantante explicó que se sometió a este tratamiento para posponer una «inminente cirugía», aunque no ahondó más en cuál es la condición que lo llevará a ser intervenido en quirófano.
Habrá que esperar a que el guatemalteco, próximo a cumplir 60 años, cuente más adelante cómo avanza su estado de salud y quizá qué padecimiento desencadenó su despedida de los escenarios.