En medio del despliegue de un intenso operativo que incluye 714 agentes de la Marina, Defensa Nacional, Guardia Nacional, Seguridad Pública y policías municipales, aparecieron restos humanos abandonados en la ciudad de Poza Rica. Los restos óseos con huellas de violencia fueron abandonados sobre la carretera Poza Rica-Cazones, junto a una manta en donde un grupo delictivo se atribuía la acción y hacía señalamientos de complicidad entre las autoridades estatales y un grupo delictivo en la zona.