Amal, la marioneta que representa a una niña siria refugiada de 10 años, inició este miércoles su recorrido por sitios emblemáticos de la capital de Oaxaca para mandar un mensaje sobre la importancia de la protección de las personas refugiadas, en especial, de las infancias. La muñeca, de tres y medio metros de altura, que se ha convertido en un símbolo de los derechos humanos, ha recorrido 14 países desde 2021. México es la primera nación latinoamericana que pisa.