Una residencia de una de las zonas más exclusivas de la Ciudad de México y que fue decomisada al crimen organizado será donada por el gobierno federal a un activista en favor de los derechos de las personas con discapacidad motriz para convertirla en un centro de atención a ese sector.
El presidente Andrés Manuel López Obrador se comprometió con el joven Daniel Robles Haro, activista y comunicador con discapacidad motriz, que estuvo en la mañanera, donde dialogó con el mandatario y le presentó una serie de propuestas en favor de quienes viven con este tipo de discapacidad.
El joven activista también planteó que en conjunto con el Consejo Nacional de Humanidades, Ciencia y Tecnología se puedan desarrollar sillas con asientos especializados para personas con discapacidad motriz.
En la red social Threads, el presidente posteó dos mensajes. En el primero señaló: “Instruimos al Conahcyt desarrollar un proyecto de sillas y asientos ergonómicos especializados que mejoren su calidad de vida. Daniel está haciendo mucho por las personas de la comunidad que representa; contribuyó a elaborar los contenidos de los libros de texto gratuitos y dio ideas al IMSS para hacer instalaciones accesibles”.
En el segundo, el jefe del Ejecutivo señaló que petición del activista, «nos comprometimos a donar, a través del Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado (INDEP), una casa que se convertirá en estancia de día para personas jóvenes con discapacidad motriz severa”.
Previamente, López Obrador respondió a la petición de Robles Haro: “Ya tienes la casa, ya está porque hay un instituto que se llama Instituto para Devolverle al Pueblo lo Robado y ese Instituto tiene ahora dos casas, creo que una en el Pedregal y otra en Las Lomas, mañana voy a informar para ver cuál de las casas se les entrega”.