Cientos de migrantes cubanos que permanecen ilegalmente en México tras el cierre de la frontera sur de Estados Unidos podrían ser beneficiados por un nuevo programa de refugiados negociado por los gobiernos de los dos países, según anunció Washington.
“Estados Unidos está tomando medidas adicionales para ampliar el acceso a vías migratorias legales, seguras y ordenadas” en beneficio “de las personas más vulnerables que actualmente se encuentran en México”, dijo Jake Sullivan, consejero de Seguridad Nacional.